Actualmente en las organizaciones, el cambio puede ser la única constante. Al aprender a navegar en el cambio, puede convertir la incertidumbre en oportunidad y eso beneficia a la empresa y al equipo.
Al terminar este curso, hemos aprendido a fomentar habilidades para aprovechar al máximo el cambio continuo, a planificar y gestionar proyectos de cambio exitosos, a identificar y llevar a cabo oportunidades de mejora y a anticipar y abordar los factores que puedan descarrilar el cambio.
Tenemos cinco pasos que son los siguientes:
En primer lugar, tener claro el papel que cumples en el cambio. En este momento tenemos que estar abiertos a ser diferentes y hacer cosas distintas a otras empresas. Además, tenemos que involucrar al equipo. Para así conseguir que se sientan una parte esencial.
En segundo lugar, navegar por el cambio continuo. Tenemos que tomar medidas para manejar nuestros sentimientos y desarrollar resiliencia para recuperarnos de los desafíos. Hay que poner freno a las respuestas improductivas, reemplazar la negatividad con creatividad y seguir adelante a pesar de los desafíos. Además, hay que hacer un esfuerzo para que los nuevos hábitos se mantengan.
En tercer lugar, inspira a tu equipo a iniciar el cambio, esto se logra haciendo que, para ellos, sea seguro tomar riesgos y así aumenten sus niveles de compromiso, productividad y creatividad. Hay que identificar brechas y encontrar formas innovadoras de cerrarlas, experimentar con nuevas formas y hacer las cosas y mejorar continuamente los procedimientos y las practicas.
En cuarto lugar, lidera la iniciativa del cambio. Hay habilidades que hay que desarrollar como, por ejemplo, el saber poner al equipo de nuestro lado y mantener el impulso para el cambio. Tienes que explicar al equipo, por qué se esta produciendo el cambio, cuál es el cambio y sus objetivos y cuál es el alcance del cambio.
Y finalmente, abordar la resistencia al cambio. La inclinación natural de las personas es mantener las cosas como están, por lo que hay que hacer un esfuerzo mayor. Para abordar esto, tendremos que descubrir lo que motiva a la resistencia, abordar las preocupaciones validad y, por último, hacer que las resistencias formen parte de la solución. Para ayudar a esto podemos traer una ayuda temporal, reasignar algunas tareas, posponer ciertos pasos o reducir la iniciativa.